A continuación, hay una historia de dos profesionales de la estética y casi seguro que te ayudará a entender mejor tu negocio y vender más.

Pero, antes debo ponerte en situación.

Mira, hay dos tipos de profesionales en la estética y el bienestar.

A las que les va muy bien y disfrutan de su trabajo y tienen tiempo para ellas.

Y el otro tipo de profesionales son el resto.

A las que les va muy bien, son capaces de diferenciarse, de abrir líneas de negocios que no tienen la mayoría, son capaces de observar, de combinar y no hacer lo que hace su competencia.

Supongo que has entendido el mensaje y ahora te cuento la historia.

En una feria de belleza y bienestar, tras una visita y sus años de formación y experiencia en el sector, dos emprendedoras decidieron poner en marcha su propio negocio de estética. Tenían más o menos la misma edad, formación y los barrios donde pusieron sus centros de belleza eran similares.

Previamente habían trabajado ya en varios centros y tenían ciertos conocimientos que les permitía saber a qué se enfrentaban.

Ambas eran trabajadoras y tenían mucha ilusión en su proyecto.

Y las dos se formaban continuamente para sacar adelante sus centros y cumplir el sueño de vivir de su profesión. 

Incluso sus centros eran muy parecidos, tenían dos cabinas cada uno.

Sabían que se podía ganar dinero en este sector, porque sabían que facturaban los centros en los que habían trabajado. Y además conocían a profesionales que les iba bastante bien, porque es un sector donde se mueve dinero. 

Al tiempo, coincidieron nuevamente en una presentación de un producto de cosmética.

Casualmente sus vidas eran tremendamente parecidas, también en lo personal. Estaban casadas, con sus niñas menores y tenían sus centros funcionando.

Pero había una diferencia.

Una de las chicas iba tirando y tirando como podía con su negocio. Abría hasta los sábados por la tarde. Muchas horas, comía incluso en el centro algunas veces y tenía un pellizco en el estómago por no pasar más tiempo con su niña.

De las vacaciones se tenia que olvidar.

A la otra le iba bastante bien, con un buen crecimiento de clientas que se iba consolidando. Estaba feliz y contenta con su negocio, porque valoraban su trabajo y hasta se podía permitir rechazar clientas en una época fuerte de trabajo, como la Navidad.

La diferencia

¿Por qué sus vidas son diferentes?

Las dos habían tenido formación, tenían experiencia, los barrios donde trabajan eran similares, sus centros eran muy parecidos y ambas eran trabajadoras.

Y no es que una de ellas quería triunfar y la otra no, o ha sido una cuestión de suerte o mala suerte. No. Nada de eso tiene que ver.

La verdadera diferencia entre sus negocios estaba en que una de ellas apostó por:

No realizar inversión, ni pagar cuotas mensuales, ni mantenimiento, ni compleja normativa.  Decidió no repartir los ingresos de sus tratamientos, no quería depender de la gran industría. Todo para ella. Todo para ti.

Si eres una profesional que sabe de la importancia de gestionar bien su negocio, sabrás la importancia de lo que acabo de escribir.

Diferenciarse: Las clientas demandan tratamientos nuevos y además un sector cada vez más importante demandan resultados, salud y bienestar. Las celébrities son muy fieles a este tipo de tratamientos, porque saben que su belleza, depende también de su bienestar.   

Reducción de costes: La formación online ha venido para quedarse, te vas a ahorrar mucho dinero en formaciones presenciales, ya sabes, desplazamientos, hoteles, gasolina, comida, tener que cerrar tu centro para formaciones, etc.

Esto es una ventaja sobre tu competencia, tendrás más beneficios. No olvides, que tienes competencia y los costes, reducirlos es algo esencial para tu futuro. No estés en desventaja.

Fidelización: Fidelizar es lo más importante en un negocio, que vengan una y otra vez a tu centro y te paguen un precio justo.

Si trabajas la parte emocional y la experiencia como hacen los centros más prestigiosos del mundo, vas a fidelizar, porque siempre volvemos, con quienes nos hacen sentir bien.

Captar nuevas clientas: Vas a atraer a un grupo de clientes que quieren resultados y bienestar, quieren salud. Estos clientes no te regatean el precio, pagan bien. No te buscan un hueco a última hora y rápido, este público quiere desconectar, experiencias.  Valoran su salud y su bienestar, por eso vas a aprender a asesorar para su bienestar físico y emocional.

Y es por eso que te escribo sobre EL MÁSTER DE ESTÉTICA ORIENTAL.

Porque su idea es esa.

Tratamientos contrastados durante miles de años,  muy rentables y que amen tus clientas (como lo hacen las celebrities),  para tener un negocio estable y disfrutar del tiempo con tu familia.

Una Escuela diferente.

En el Máster de Estética Oriental tienes tratamientos de estética y de salud basados en la medicina tradicional china. Son prácticos y fáciles de aprender que te ayudarán a dar servicios distintos y únicos.

Una membresía que ahorra dinero.

Perdón, no me he presentado, soy Luis Pascasio.

Después de años de experiencia y trabajar con Doctoras china en mi clínica de Sevilla, aprendí que la belleza iba más allá de tratar la piel. Tenía mucho que ver con la salud, con el bienestar y sobre todo las emociones.

Por eso he conformado esta formación única en el sector y la mejor formación que puedas encontrar en hablar hispana.

No soy esteticista, ni aprendí estos cursos en un fin de semana. Llevo más de 20 años aprendiendo y soy profesional de medicina tradicional china y fué trabajar años con Doctoras chinas lo que me permitió aprender conocimientos que no encontrarás en el sector.

Dicho esto, te diré que en el Máster hay un total de 10 cursos + 2 extras

Aprendes a tu ritmo y no tienes que realizarlos todos, tú eliges.

También te diré, que no puedo prometerte que tendrás éxito al instante de empezar en la Máster de Estética Oriental. Pero puedo garantizarte que encontrarás tratamientos de gran nivel que además de resultados, te ayudarán a fidelizar a tus clientas.

Porque tratar la salud, el bienestar físico y emocional es una de las ideas del concepto de la belleza oriental.

y ahora te diré que vas a aprender cuando entres en el Máster.